La coca de llanda es más que un simple bizcocho; es una joya de la repostería tradicional valenciana que ha sido transmitida de generación en generación, manteniendo viva una parte esencial de nuestra cultura gastronómica. Este dulce se hornea en una bandeja rectangular de paredes bajas conocida como «llanda,» y se prepara con ingredientes sencillos que todos tenemos por casa. Su sabor y textura es absolutamente increíble y evocan recuerdos de la infancia y momentos compartidos en familia.

En muchas casas valencianas, preparar una coca de llanda es un ritual que conecta el pasado con el presente, uniendo a las familias en torno a los aromas cálidos y dulces que salen del horno. Al igual que nuestros pobrecitos de «El Tigre», la coca de llanda forma parte del patrimonio culinario de la Comunidad Valenciana, simbolizando la tradición y el orgullo por lo nuestro. Ambas delicias, aunque distintas en naturaleza, comparten el valor de lo auténtico y lo artesanal, siendo testimonio de una herencia que perdura en el tiempo y que sigue siendo disfrutada por generaciones.

A continuación, te invitamos a descubrir cómo preparar esta deliciosa coca de llanda, para que puedas saborear un pedacito de la tradición valenciana en tu hogar.

Ingredientes:

  • 125 gramos de azucar
  • 120 gramos de leche
  • 2 huevos
  • 120 gramos de aceite
  • 200 gramos de harina
  • una pizca de sal
  • ralladura de un limón
  • canela en polvo
  • 2 sobres dobles de soda El Tigre

Elaboración:

  1. Precalentamos el horno a 180ºC.
  2. Batimos los huevos junto con el azúcar.
  3. Añadimos el aceite, la leche, la pizca de sal y la ralladura.
  4. Añadimos los dos sobres de gasificante El Tigre y batimos.
  5. Tamizamos la harina sobre la masa y mezclamos con ayuda de una espátula y con movimientos envolventes.
  6. Vertemos en un molde rectangular, espolvoreamos azúcar y canela y llevamos al horno a 180ºC, con calor arriba y abajo, durante 25 minutos aproximadamente.